Gestas del fútbol colombiano
La alegría de un pueblo
La alegría de un pueblo

Domingo 5 de Septiembre de 1993, una tarde con mucha ilusión e incertidumbre al mismo tiempo, esos eran los matices que describian los sentimientos de toda una nación que anhelaba que la selección Colombia hiciera historía en el mitico estadio Monumental Antonio Vespucio Liberti en Buenos Aires Argentina.
Aquella tarde los combinados nacionales de Argentina y de Colombia eran el centro de atención de aficionados, periodistas, personas vinculadas al futbol e incluso de individuos del común.
Los problemas tanto personales como inherentes a un país quedaron en el olvido en el momento que rodo el balón en la cancha del Monumental de Nuñez. Minuto 40 de la primera etapa, estalla la emoción en toda Colombia, Fredy Rincón anota el primer gol del partido; se silencian las tribunas del estadio argentino, Colombia acariciaba la clasificación al mundial de USA 1994.
El segundo tiempo fue una total y contundente sinfonía dirigida por el gran Carlos “El Pibe” Valderrama, que junto al “Tino” Asprilla, el “Tren” Valencia, Rincón, Oscar Cordoba, Mendoza, Leonel Alvarez y otros grandes jugadores se encargaron de hacer historia con un inolvidable 5 –0, el cual llevo a Colombia a tener el calificativo de favorito para el Mundial de 1994.
Este favortismo desmedido, por parte de hinchas, jugadores y en especial de la prensa provocaron afirmaciones y escenarios relacionados con el 5-0 frente Argentina y la pobre actuación futbolística en el Campeoanto Mundial de fútbol. “Los herores del 5-0 en Buenos Aires, Argentina pasaron a ser los delincuentes de USA 1994.
Las grandes selecciones serán recordadas a lo largo de la historia no solo pro exhibir buen fútbol sino también por haber conseguido títulos o resultados que lo dejen reseñado en los libros de fútbol.
Juan Villoro, novelista, enasayista, cuentista y periodista mexicano en su libro “Dios es Redondo”, nos describe la verdera pasión del fútbol entre diversas personas sin importar su género, su condición social y mucho menos su color de piel. “Dios es redondo explora las supersticiones, los ritos y los mitos que han convertido a los estadios en catedrales , a los jugadores en apóstoles y a los árbitros en ángeles del infiernos investidos del poder de quebrar la esperanza o desatar una vanidosa crueldad.
El equipo dirigido por Francisco Maturana no logró cumplir con la expectativa creada para el Mundial de Estados Unidos en 1994, debido a su prematura eliminación, enfrentando a las selecciones de Rumania, Suiza y la anfitriona Estados Unidos. Pero a pesar de esto su futbol será recordado por la prensa los hinchas y la gente allegada a este deporte, que jamas olvidará aquel sentimiento de alegria del 5 de Septiembre de 1993.